Un hombre de 26 años fue detenido este lunes en un restaurante McDonald’s de Pensilvania (EE.UU.) tras seis días de intensa búsqueda por el asesinato del director ejecutivo de la aseguradora médica UnitedHealthcare, Brian Thompson, a plena luz del día en el centro de Nueva York.
Las autoridades pusieron nombre, Luigi Mangione, al sospechoso que aparecía desenmascarado y sonriendo en una foto ampliamente distribuida por la Policía de Nueva York, supuestamente mientras flirteaba con la recepcionista de un hostal días antes de disparar por la espalda y matar a Thompson.
Mangione, identificado y detenido en Pensilvania como sospechoso del asesinato del CEO de UnitedHealthcare, Brian Thompson, compareció por la tarde ante un juez, quien ordenó que quede en custodia sin posibilidad de fianza, según recogen medios estadounidenses.
De momento, está acusado de cinco delitos relacionados con posesión de armas y falsificación de identidad, pero las autoridades dicen tener “una montaña de pruebas”, entre ellas un escrito tipo “manifiesto” y un arma compatible con el crimen, y esperan que pronto se le sume el delito de homicidio.
Además, Mangione -cuya imagen había compartido el Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) en los últimos días- tenía en el momento de su detención Mangione llevaba un arma capaz de disparar balas de nueve milímetros y con silenciador que pudo haber sido fabricada con una impresora 3D, y un documento escrito a mano que contenía “animadversión hacia la América corporativa”.
¿Cómo fue la detención del sospechoso del asesinato del director de UnitedHealthcare?
La detención se produjo en un McDonald’s de Altoona (Pensilvania), donde el sospechoso estaba comiendo y lo reconoció un empleado que llamó a la Policía local.
Aunque no se ha determinado el móvil del crimen, el sospechoso dejó en la escena tres casquillos de bala inscritos con las palabras “delay” (retrasar), “defend” (defender) y “depose” (destituir), una posible referencia a la estrategia común utilizada por las aseguradoras médicas para rechazar reclamaciones.
Eso era lo poco que se sabía desde que se le perdió la pista el 4 de diciembre en una estación de autobuses menos de una hora después de que tiroteara a Thompson, cerca de las 7 de la mañana, delante de un hotel del centro de Manhattan y de que huyera en una bicicleta eléctrica hasta Central Park.
El teniente coronel George Bivens de la Policía de Pensilvania dijo hoy, después de que Mangione fuera formalmente acusado ante un juez, que el hombre llevaba varios días en ese estado y que la investigación se está centrando en seguir sus pasos y determinar si tuvo algún “cómplice”.
Mangione está encarcelado sin opción a fianza, y durante la audiencia judicial no se pronunció sobre su culpabilidad pero dijo no tener conocimiento de dos alegaciones de los fiscales: que llevaba unos 8.000 dólares en efectivo encima y que su mochila es capaz de bloquear la red celular, según CNN.
Desde que fue revelada la identidad del presunto asesino, sus cuentas en redes sociales han amasado miles de seguidores y comentarios, y han sido escrutinizadas por un público en busca de respuestas hasta el punto en que, en algunos casos, han sido suspendidas, como las de Instagram y Facebook.
Algunos se fijaron en su perfil de la red de lectura Goodreads, donde figura su buena opinión del manifiesto del terrorista estadounidense Theodore Kaczynski, más conocido como “Unabomber”, al que califica como un “revolucionario político extremo”.
El crimen ha generado una reacción inesperada de parte de la sociedad, que ha acudido a las redes sociales a expresar simpatía con el sospechoso e incluso a burlarse de la víctima como parte de sus críticas hacia las prácticas lucrativas de las aseguradoras médicas del país.
“Combinación de trabajo detectivesco”
En la rueda de prensa, en la que también participó el alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, recalcó que esta detención se hizo posible gracias a una “combinación de trabajo detectivesco de la vieja escuela y tecnología de la nueva era”, así como por la revisión de videos.
El gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, declaró en ese sentido que el acusado “es un cobarde, no un héroe”, e hizo una comparación con el intento de asesinato del futuro presidente Donald Trump en campaña para reivindicar que la violencia no debe usarse para abordar temas políticos o ideológicos.
Un portavoz de UnitedHealthcare dijo hoy que la empresa espera que la detención del sospechoso, que se ha producido precisamente en el día del funeral de la víctima, “dé algún alivio a la familia, amigos y compañeros de Brian y a otros tantos afectados por esta tragedia inefable”.
Por su parte, la familia de Mangione, a través de un comunicado de su primo Nino Mangione, que es un congresista republicano, aseguró estar “sorprendida y devastada” por las noticias, ofreció sus condolencias a la familia de Thompson y pidió oraciones “para todos los involucrados”.
El veinteañero nació y se crió en Maryland, y ha vivido en San Francisco, Pensilvania y Hawái, según la Policía.